Ángel Enrique Burgos ataca sin piedad a sus dos perros chihuahuas hasta matarlos
- El hispano Ángel Enrique Burgos acaba con sus perritos
- Los chihuahuas murieron de manera tormentosa
- Ahora el hispano enfrentará la justicia
Como una «muerte dolorosa y horrible» catalogaron las autoridades la forma en la que un hispano le arrebató la vida a sus mascotas.
Se trata de dos perros chihuahuas, a los que apuñaló despiadadamente y luego arrojó a un estanque de agua.
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Lincoln y Casper eran dos perros, mestizos, adultos, que habían sido adoptados por un joven de 21 años y trasladados a una casa, en la ciudad de Haines, en Florida.
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Ángel Enrique Burgos atacó a sus mascotas
Los aullidos y ladridos de las mascotas erizaban la piel de todos en la comunidad, era ya de noche, y muchos no se explicaban por qué el desasosiego de los animales.
La situación se tornó tan perturbadora que algunos decidieron notificar la irregularidad a las autoridades.
Policías en compañía de agentes de control animal se acercaron al vecindario de Hidden Lake para descartar alguna anomalía hacia las mascotas, pero llegaron tarde.
El ruido se había calmado y uno de los vecinos dijo haber visto al hispano caminar por la comunidad con los pequeños perros en sus manos.
El hispano había adoptado a los perritos
Los detectives reunieron imágenes de vigilancia de varios residentes.
Mostraban a Ángel Enrique Burgos, de 21 años, cargando dos perros y caminando hacia un estanque, informó la Oficina del Sheriff de Polk a través de un comunicado.
En el lugar no había rastro de los perros, los agentes comenzaron la búsqueda en el agua y ahí estaban los dos cuerpos.
Ambos fueron recuperados y transportados a un centro médico veterinario.
Los masacró de arriba a abajo
Antes de la llegada de los oficiales, el principal sospechoso había intentado deshacerse de las evidencias que lo incriminaban, arrojándola a un bote de basura cercano al lugar.
Entre los desechos, los detectives recuperaron un par de chanclas negras, un par de calcetines, un pantalón corto azul, una camiseta gris y un cuchillo de mango negro.
Todos estaban salpicados de sangre, presuntamente de las mascotas.
Ángel Enrique Burgos, según las autoridades, quedó bajo arresto inmediatamente.
Los vecinos llamaron a la policía
Acusado de los cargos de crueldad animal, manipulación de pruebas, dos cargos de eliminación inadecuada de animales fallecidos y dos cargos de vertido ilegal.
A las pocas horas se conoció el resultado del examen veterinario. Las huellas en los cuerpos de los canes mostraron la crueldad del ataque.
Lincoln sufrió aproximadamente 14 heridas punzantes y Casper sufrió aproximadamente siete, detalló en su reporte oficial la Oficina del Sheriff.
El informe del médico veterinario indicaba que a ambos perros los golpearon y los apuñalaron en varias ocasiones, provocando que ambos se ahogaran con su propia sangre.
Enfrentará a la justicia
“Este comportamiento por parte de Burgos es repugnante», dijo el alguacil Grady Judd en una conferencia de prensa.
«Causó el dolor, el sufrimiento y la muerte de dos perros a los que tenía la responsabilidad moral de criarlos y brindarles cuidado», precisó.
El sheriff se mostró desconcertado por la actuación del joven. «La depravación humana como esta todavía me sorprende. No hay excusas».
La comunidad de Hidden Lake lamenta el injusto final de las mascotas, esperan que haya un castigo contundente para el agresor.
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