El milagro de los andes y el vuelo 571
- El milagro de los andes y el vuelo 571.
- Una historia que marcó y conmocionó al mundo entero.
- Han pasado más de 50 años desde aquel accidente.
Algunos lo llaman el milagro de los andes y, otros lo describen como un ejemplo de fe y perseverancia.
Aferrarse a la vida cuando es lo único valioso que queda, es lo que hicieron los sobrevivientes de este accidente.
40 pasajeros y 5 tripulantes estaban a bordo, en un vuelo que partía desde Montevideo hasta Santiago de Chile.
Sin embargo, de las 45 personas a bordo, tras el accidente solo 16 regresaron con vida.
El vuelo 571 de la Fuerza Aérea Uruguaya.
El presidente de un equipo de Rugby Uruguayo contrató a un avión de la fuerza aérea uruguaya para hacer un viaje.
Muchos de los presentes eran jóvenes de entre 18 y 25 años, además de algunos familiares presentes.
A pesar de las malas condiciones climatológicas, el vuelo partió un 13 de octubre de 1972.
Eso fue solo el inicio de la terrible tragedia que estaría por marcar sus vidas.
El milagro de los Andes del 72.
Además, los fuertes vientos durante el trayecto, hicieron que el avión comenzara a presentar fallas.
Al perder el control, se estrellaron en una de las inmensas montañas de la Cordillera de los Andes.
El avión se partió a la mitad, un escenario horrendo que parecía sacado de las más tétricas películas de terror, era una realidad.
Tras el impacto, la nieve sepultaba la mitad de los cuerpos de aquellos que estaban vivos, gritos de dolor y desesperación resonaban entre los restos del avión.
Sucesos tras el accidente.
Muchos jóvenes se encontraban en shock, parientes buscaban a sus familias entre los restos del avión…
Durante la primera noche que pasaron, los más heridos sucumbieron ante la hipotermia y las peligrosas temperaturas.
Sin embargo, ninguno de ellos habría imaginado lo que tendrían que hacer para sobrevivir.
De mil formas intentaron buscar la manera de hacer funcionar la radio del avión, pero no tuvieron éxito.
Más de 2 meses estuvieron allí, esperando un rescate.
Luego de saber que nadie iría a buscarlos, con el paso de los días los sobrevivientes tuvieron que ingeniárselas para vivir.
La fe, la fuerza de voluntad y el temple siempre fueron clave para mantenerse firme.
El frío era apabullante, sentías miles de afiladas cuchillas atravesando tu cuerpo.
Las noches eran las más difíciles, pero aún así, lograron buscar formas para mantenerse con vida.
Métodos impensables para sobrevivir
¿Qué tan lejos podrías llegar para sobrevivir? ¿Para aferrarte tanto a la vida como para no dejarla ir?.
En un principio, tenían suministros, buscaron entre el equipaje y encontraron galletas, chocolates y alimentos sencillos.
Pero tras acabarse la comida, se enfrentaban al reto más letal de todos, el hambre.
Por lo tanto, recurrieron a un método que nadie habría imaginado, el canibalismo.
¿Cómo se alimentaban?
Al acabarse la comida, tuvieron que empezar a consumir los cuerpos de los pasajeros fallecidos.
En pocas porciones, algunos testimonios indican que esto fue una experiencia traumatizante para todos.
Además, algunos se ofrecían a hacer el trabajo sucio, llevar los cuerpos hasta donde nadie podía verlos para picarlos.
Limpiaban los trozos y los ofrecían en pequeñas porciones, se dice que usaban la nieve para disfrazar el sabor.
Expediciones extremas en búsqueda de un rescate
Durante los 72 días en los que estuvieron atrapados, los sobrevivientes realizaron distintas expediciones.
Encontraron así, la otra parte del avión en donde consiguieron suministros e incluso lo necesario para hacer funcionar una radio.
Sin embargo, fue en la última expedición, en donde la resiliencia de dos jóvenes jugadores de Rugby se puso a prueba.
Caminaron durante 7 días, hasta llegar a un riachuelo en Chile, donde fueron encontrados por un campesino que les ayudó.
El rescate esperado finalmente llegó
Muchos se preguntan, ¿por qué tardaron tanto en rescatarles?.
Y es que, según estadísticas de aquellos tiempos, en 34 de los accidentes ocurridos en los andes, nunca hubo sobrevivientes.
Tras el aviso de estos jóvenes, lograron rescatar a 16 sobrevivientes de la terrible tragedia de los andes .
Se convirtieron en el símbolo de la resiliencia, del milagro. Algo que siempre quedará enmarcado en la historia.