Charles Beltrán, acusado de matar a Marisela Botello, dice que no la mató
- Charles Beltrán, el acusado de matar a la joven Marisela Botello en Dallas, Texas, asegura que él no la mató.
- Beltrán señala a Lisa Dykes, una de sus dos novias, como la responsable de haber apuñalado a la chica
- Según Beltrán su otra novia, Nina Marano, también atestiguó todo y junto con Dykes limpiaron la escena del crimen.
Charles Beltrán, el hombre acusado de haber matado a la joven hispana Marisela Botello en Dallas, Texas, sostiene que él no la mató. Sin embargo, admite que sí vio a quien lo hizo y señala a Lisa Dykes como la persona que asesinó a puñaladas a la muchacha. Nina Marano, la tercera persona acusada del crimen de Botello, también vio todo, según el acusado.
Los documentos legales del caso, consultados en exclusiva por MundoHispánico, arrojan una nueva versión en el brutal homicidio de la joven Marisela Botello, de 23 años, quien desapareció en Dallas, Texas, luego de salir al Select Start Bar en donde conoció a Charles Beltrán, de 31 años, ahora acusado de su asesinato. Un crimen que ha sacudido a Texas.
Charles Beltrán asegura que no mató a Marisela Botello
Charles Beltrán, Nina Marano y Lisa Dykes enfrentan el cargo de homicidio capital por la muerte de Marisela Botello ocurrido en algún punto de la noche del domingo 4 de octubre del 2020 en Dallas, Texas, luego de que la chica conoció al muchacho en el bar. Beltrán, Marano y Dykes vivían juntos.
El testimonio de Charles Beltrán, ofrecido a los agentes de la División de Homicidios del Departamento de Policía de Dallas (DPD, por sus siglas en inglés), podría arrojar luz sobre el brutal deceso de Marisela Botello y quien apareció tirada en un bosque de Texas cinco meses después de su desaparición.
Charles Beltrán, Lisa Dykes y Nina Marano los acusados
Charles Beltrán, Lisa Dykes y Nina Marano están acusados, entre otros delitos, del cargo de homicidio capital y que de acuerdo al Código Penal del Estado de Texas es el único delito que se castiga con la pena de muerte a quien se declare culpable en un juicio. Sin embargo, el testimonio de Beltrán podría ser tan sólo una estrategia para librarse justo de esa pena de muerte.
Beltrán, de 31 años, estaba fugitivo por el homicidio de Marisela Botello y fue detenido por agentes federales de los U.S. Marshals en la ciudad de West Jordan, Utah, un suburbio al suroeste del área metropolitana de Salt Lake City, el viernes 2 de abril del 2021. La semana pasada fue extraditado a Texas.
La desaparición de Marisela Botello
Marisela Botello viajó desde Seattle, Washington, el viernes 2 de octubre del 2020 para visitar a su exnovio y con quien tenía una buena relación de amistad pese a haber roto su romance. El domingo 4 de octubre la muchacha le dijo a su amigo que saldría tomar unas copas al vecindario Deep Ellum la zona de moda en Dallas.
Después de esa salida Marisela Botello desapareció. Las cámaras de seguridad del Select Start Bar le revelaron al DPD que la chica salió del lugar acompañado por un hombre musculoso, afrohispano, y se les vio caminando por la calle. Las autoridades identificaron al hombre como Charles Beltrán quien se negó a testificar a las autoridades y dejó Texas.
Charles Beltrán acusa a Lisa Dykes
Luego de su arresto Charles Beltrán le contó a los agentes de la División de Homicidios del DPD que efectivamente conoció a Marisela Botello en el Select Start Bar del Deep Ellum y que luego de tomarse unas copas los dos muchachos acordaron tener sexo en la casa del muchacho, 3113 Kensigton Drive en Mesquite, Texas, un suburbio al sureste de Dallas.
Según Charles Beltrán, tuvo sexo con Marisela Botello hasta que ambos quedaron exhaustos y se durmieron. En medio de la noche el hombre se despertó y asegura que vio a Lisa Dykes sobre el cuerpo de la muchacha y armada con un cuchillo asestándole varias puñaladas mientras con la otra mano la sujetaba por el cuello.
Lisa Dykes y Nina Marano se «encargaron de todo»
Charles Beltrán sostiene que empujó a Lisa Dykes y a Marisela Botello. Ambas mujeres rodaron al piso del cuarto. Justo entonces entró al cuarto Nina Marano, alertada por la conmoción, y quien le ordenó a Beltrán que saliera del cuarto. El muchacho asegura que se vistió, salió del cuarto y se fue de la casa en la que vivía con las dos mujeres.
Durante el lunes 5 de octubre del 2020 Charles Beltrán sostiene que volvió a la casa y encontró el cuerpo «inmaculado». Las dos mujeres le aseguraron que ya se habían «encargado de todo» y que no se preocupara. El DPD sostiene que las dos mujeres limpiaron la casa y se deshicieron del cuerpo de Marisela Botello.
Charles Beltrán el novio de Lisa Dykes y Nina Marano
Los documentos del caso detallan que la relación entre Lisa Dykes, Nina Marano y Charles «es incierta» para la policía. Sin embargo, por medio de una testigo que habló con MundoHispánico a condición de mantener el anonimato, Lisa, Nina y Charles tenían una relación sentimental abierta y los tres estaban de acuerdo en tener sexo con otras personas.
Lisa Dykes, 57 años, y Nina Marano, 49 años, de acuerdo con la fuente que les conoció a los tres, se presentaban a sí mismas como Lisa Beltrán y Nina Beltrán declarando ser las novias del muchacho. Nina Marano es abogada, con licencia en Texas, y Lisa Dykes es asistente legal y las dos intentaron reclamar la custodia legal de la hija legal de Charles Beltrán el año pasado.
Aparece el cuerpo de Marisela Botello
Según los agentes de la División de Homicidios del DPD los registros de los teléfonos celular de Lisa Dykes, Nina Marano y Charles Beltrán, ubicados por medio del Sistema de Posicionamiento Global (GPS, por sus siglas en inglés), revelan que los tres estuvieron juntos todo el tiempo en la casa en la que murió Marisela Botello.
El miércoles 24 de marzo de 2021, unos caminantes que rondaban por un bosque remoto cerca del pueblo de Wilmer, en el sureste del área metropolitana de Dallas, descubrieron restos humanos entre la maleza y llamaron al número de emergencias de la Oficina del Alguacil del Condado de Dallas (DCSO, por sus siglas en inglés).
Charles Beltrán, Lisa Dykes y Nina Marano son detenidos
Los análisis forenses en los restos humanos en el bosque le permitieron a las autoridades del DCSO y el DPS determinar que eran los restos de la joven Marisela Botello desaparecida en Dallas desde el 4 de octubre. Los registros telefónicos de Beltrán, Dykes y Marano ubicaron a los tres en la misa zona en la que se descubrió a la muchacha.
En ese momento Charles Beltrán, Lisa Dykes y Nina Marano ya eran considerados fugitivos y el Buró Federal de Investigaciones (FBI, por sus siglas en inglés) y los U.S. Marshals entraron al caso para ayudar al DPD y encontrar a los tres presuntos asesinos de Marisela Botello. Las mujeres fueron detenidas, en incidentes separados, en Florida.
Charles Beltrán, también era el rapero 5050Chuck
La fuente que habló con MundoHispánico sostiene que Charles Beltrán conoció a Lisa Dykes por medio de su hijo Kyle Willams y quien era empleado del Select Start Bar. Dykes y Beltrán entablaron una relación romántica a la que luego se sumó Marano. Las dos mujeres corrían con todos los gastos del muchacho y quien apostaba su vida a ser un rapero famoso.
Beltrán se ganaba la vida como ‘bouncer’, portero de bares y clubes, en el área metropolitana de Dallas. Sin embargo, el hombre decía que estaba concentrado en su carrera de rapero presentándose como 5050Chuck rodeado de mujeres sensuales y autos caros. Los videos de sus canciones eran costeados por Lisa Dykes y Nina Marano.
Charles Beltrán tiene amplio historial criminal
En el video de la canción Picture Me This el rapero 5050Chuck, Charles Beltrán, utilizó como escenario la casa de Mesquite, Texas, en la que vivía con sus dos novias Lisa Dykes y Nina Marano y en la cual presuntamente mataron a Marisela Botello. Beltrán tiene historial criminal en Texas por cargos que van desde posesión de drogas hasta asalto agravado.
Para escribir esta historia MundoHispánico en Texas contactó a las firmas de abogados que representan a Lisa Dykes y Nina Marano sobre la declaración de Charles Beltrán. Sin embargo, hasta el momento de cerrar éste párrafo ninguna de las dos representaciones legales había respondido a la solicitud de una entrevista.