Vickie Dawn Jackson, El Ángel de la Muerte-Crímenes de terror
En un lapso de tan solo un año, Vickie Dawn Jackson ultimó a varios de sus pacientes utilizando un relajante muscular llamado Mivacron, y aunque las pruebas fueron suficiente para relacionarla con los crímenes, Jackon siempre mantuvo su inocencia en todos los casos.
¿Quién fue Vickie Dawn Jackson?
El Ángel de la Muerte, cuyo nombre de pila es Vickie Dawn Carson, nació el 13 de febrero de 1966 en el condado de Montague, en Texas. De su infancia y adolescencia se sabe poco, pero se ha podido confirmar que a la edad de 23 años obtuvo su licencia como enfermera vocacional.
Durante varios años, Jackson destacó por su dedicada labor en el cuidado de sus pacientes y nunca demostró una conducta que generara sospechas. Sus colegas y jefes siempre alabaron su disposición por el trabajo y por siempre seguir las indicaciones que le daban, pero esto cambiaría unos años más tarde.
Los asesinatos cometidos por Vickie Dawn Jackson
En 11 diciembre del año 2000, Vickie cometió el que, se cree, fue su primer asesinato; ese día, llenó una jeringa con cloruro de mivacurio, una sustancia que paralizaba el sistema respiratorio, y comenzó a caminar por los pasillos en busca de su primera víctima. Este fue el inicio de una serie de misteriosos asesinatos en el Hospital General de Nocona; todas sus víctimas eran adultos mayores de entre 62 y 100 años.
En un inicio, se creyó que las muertes se debían al estado de salud de los pacientes, así como a su avanzada edad; sin embargo, una investigación interna arrojó que un empleado había estado robando grandes cantidades de cloruro de mivacurio, y que todas las muertes ocurrieron en un mismo turno. Gracias al testimonio de Donnelly Reid, un sobreviviente de Vickie Dawn Jackson, la policía pudo arrestar a la enfermera, quien para ese entonces ya había sido despedida del hospital.
Arresto de Vickie Dawn Jackson
Ante la sospecha de los directivos de la clínica de que ella podía ser la culpable de los asesinatos, Jackson fue despedida de su trabajo como enfermera, hecho que la llevó a encontrar una nueva profesión lejos de los hospitales. Al momento de su arresto, la mujer trabajaba en un supermercado local.
La policía arrestó a Vickie Dawn Jackson el 16 de julio de 2002, acusándola formalmente de cuatro asesinatos. Con una orden de cateo y un proceso de investigación que incluyó la exhumación de las víctimas, la policía recabó pruebas suficientes para llevar a juicio a Jackson.
Juicio
El primer juicio de Vickie Dawn Jackson fue descartado a petición del juez, por lo que rápidamente fue sometida a un nuevo juicio, donde los investigadores aseguraron tener pruebas obtenidas dentro de la casa de Jackson, entre las que se encontraban restos de Mivacurio. En las interrogaciones, un agente del FBI determinó que Jackson había matado a sus pacientes por ser “muy demandantes”.
En un acuerdo con el jurado para evitar que su propia hija testificara en su contra, Vickie Dawn Jackson aceptó la condena por diez asesinatos y declaró “no saber” por qué los había cometido. Mediante un comunicado, mantuvo su inocencia, y aunque buscó que la sentencia sea revertida, actualmente se encuentra encarcelada en Gatesville, California, donde permanecerá, al menos hasta el año 2042.