Un año de la masacre de Uvalde: Mamá de niña que murió está enfurecida y hace lamentable confesión (FOTOS)

• Se cumple un año del terrible tiroteo en escuela primaria en Uvalde, Texas
• Madre de la víctima Eliahna Cruz de 10 años, asegura que no se han visto cambios
• Enfurecida, la madre de la víctima pide que haya cambios entorno a la violencia que se vive

Un año de la masacre de Uvalde: La terrible masacre que ocurrió en una escuela en Uvalde, Texas, continúa siendo uno de los hechos más desgarradores ocurridos en el 2022. Pues a un año de este terrible acontecimiento que acabó con la vida de 19 niños y dos maestras, aún existen una gran problemática por resolver entorno a la violencia.

Una madre de una de las niñas que murió víctima del tiroteo, mostró su gran molestia debido a que, a un año de este terrible suceso, no han habido cambios entorno a la prohibición de armas. Es así como la madre de la pequeña Eliahna Cruz Torres pidió que se haga algo al respecto.

Madre de niña que murió en el tiroteo, asegura que todo sigue igual

«Estoy enfadada y frustrada porque todo es igual, nada ha cambiado, no se ha hecho nada», cuenta a Efe Sandra Torres, madre de Eliahna Cruz Torres, una de las niñas fallecidas en la Escuela Primaria Robb el 24 de mayo de 2022, cuando un joven de 18 años entró con un rifle de asalto y mató a 19 niños y dos maestras.

Hoy 24 de mayo del 2023 se cumple un año del tiroteo en Uvalde, y EFE informó que la madre de familia ha acudido con su familia, llevando una escoba para limpiar, a la pequeña plaza donde se instalaron cruces para recordar a las víctimas de la segunda mayor matanza escolar en la historia de Estados Unidos, ‘El País‘ informó que en general, muchos padres están viviendo una gran frustración debido a que no se ha prohibido o restringido el uso de armas hasta la actualidad.

Un año de la masacre de Uvalde: Madre Eliahna revela la forma en la que mantiene la memoria de su hija presente

Para la agencia EFE, la madre, quien sigue hablando en presente de su hija, revela que mantiene el lugar limpio en donde sucedieron los hechos. «A veces venimos y decoramos, cambiamos las luces. Sabía que ha habido viento y lluvia, así que vine para asegurarme de que está limpio para ella».

La niña Eliahna Cruz fue asesinada con apenas 10 años de edad. EFE dio a conocer que la masacre tras la cual pareció, por un instante, que iba a ser la gota que colmaba el vaso e iba a provocar que se tomaran medidas para restringir el acceso a las armas de fuego. Pero fue solo un espejismo que quedó en nada en un país en el que las matanzas se cuentan por decenas. 237 tiroteos múltiples -con más de cuatro víctimas, heridas o fallecidas- en lo que va de año, según la organización Gun Violence Archive.

Un año de la masacre de Uvalde: Los obsequios que la gente deja para conmemorar la memorias de los niños fallecidos

Junto a la cruz de Eliahna se pueden observar flores y mariposas, sus favoritas. Osos de peluche, mariquitas de colores, globos con forma de estrella o muñecos de spiderman decoran el resto de las cruces, indicó la agencia EFE. Además, al lado de muchas de ellas, una carta de las familias pidiendo respuestas y señalando al que consideran único culpable de la tragedia: «Los lobbies de las armas, que tienen más poder que la gente», apunta el texto.

Aunque el suceso cambió para siempre la vida de estas familias y en muchas puertas de las casas de esta ciudad de 15.000 habitantes cuelga un cartel de «Uvalde Strong» (Fuerza Uvalde), pocas cosas han cambiado en los últimos doce meses, en los que muchos de los familiares de los niños fallecidos se han convertido en activistas en pro de un control más exhaustivo de las armas.

Son varias las familias que han denunciado a las autoridades, y también al fabricante del rifle AR-15 que portaba Ramos

«Ya ha pasado un año y siento que fue ayer. Ya no tengo a mi bebé y nada de lo que pueda decir o hacer la traerá de vuelta. Pero lo que podemos estar haciendo y lo que vamos a seguir haciendo es luchar, luchar por la justicia y luchar por el cambio», apunta Sandra.

La escuela fue cerrada tras lo sucedido. Hoy la rodea una malla, cubierta con un plástico negro, a la espera de ser demolida. En los próximos meses, cuentan las autoridades locales, desaparecerá y quedará todavía menos de aquel suceso que cambió a muchos pero no cambió nada, informó EFE.