Trump elige a los principales promotores del Project 2025 que dijo desconocer
- Trump prepara su regreso con figuras clave de Project 2025
- Varias propuestas en camino
- Aquí los detalles
Tras negar su vinculación con el polémico Project 2025 durante su campaña, Donald Trump ha comenzado a rodearse de los principales autores e influenciadores del plan.
A pesar de calificar el proyecto como «ridículo y abismal» antes de las elecciones, Trump ahora recurre a sus principales promotores para ocupar cargos estratégicos en su próxima administración.
Entre los nombramientos más destacados se encuentran Russell Vought como director de la Oficina de Presupuesto y Gestión (OMB), Tom Homan como «zar de la frontera».
Además de Stephen Miller como subjefe de políticas, reflejando una alineación clara con las ideas de derecha que definieron su primera presidencia, según reporta The Associated Press.
Trump prepara su regreso con figuras clave de Project 2025 en su administración
Trump’s transition team is reportedly using Project 2025’s personnel database to find potential administration hires.
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— Rolling Stone (@RollingStone) November 22, 2024
El Project 2025, desarrollado en gran parte por aliados de Trump, esboza una transformación drástica de las funciones del gobierno federal.
Centralizando el poder en la presidencia y reestructurando profundamente la administración pública, así lo informa la agencia de noticias The Associated Press.
Russell Vought, quien ocupó el mismo cargo bajo Trump, ve en la OMB un instrumento para ejercer un control directo sobre las agencias federales.
En un capítulo que escribió para el proyecto, describió al director de la OMB como «el sistema de control del tráfico aéreo del presidente», capaz de imponer disciplina fiscal y anular la burocracia de las agencias.
Control sobre inmigración y deportaciones masivas
Trump justificó su elección diciendo que Vought «sabe exactamente cómo desmantelar el Estado profundo» y lo calificó como esencial para «restaurar la cordura fiscal».
Sin embargo, los demócratas advierten que Vought busca ampliar el poder presidencial a expensas de la supervisión del Congreso.
En temas migratorios, los nombramientos de Stephen Miller y Tom Homan refuerzan la alineación de Trump con las propuestas de Project 2025.
Miller, uno de los principales arquitectos de las políticas migratorias de Trump, vuelve como subjefe de políticas, cargo que no requiere confirmación del Senado.
En un mitin reciente, Miller proclamó: «América es para los estadounidenses y solo para los estadounidenses».
Por su parte, Homan, quien fue director interino de ICE durante la primera presidencia de Trump, desempeñará un papel crucial en la aplicación de medidas de inmigración más restrictivas.
Incluida la promesa de crear la mayor fuerza de deportación en la historia de EEUU. Homan declaró anteriormente: «Si estás aquí ilegalmente, más vale que mires por encima del hombro».
Trump también ha designado a figuras vinculadas al Project 2025 en áreas estratégicas como la inteligencia y las telecomunicaciones.
Reformas profundas en inteligencia y telecomunicaciones
John Ratcliffe, exdirector de inteligencia nacional, liderará la CIA.
Mientras que Brendan Carr, autor del capítulo del proyecto sobre la Comisión Federal de Comunicaciones (FCC), encabezará este organismo.
Carr aboga por frenar el poder de las grandes tecnológicas, promoviendo reglas de transparencia más estrictas para plataformas como Facebook y YouTube,.
Y permitiendo a los usuarios elegir filtros de contenido.
Críticas de los demócratas
Los nombramientos han generado una ola de críticas por parte de los demócratas.
Y es que advierten que Trump busca erosionar las protecciones de los trabajadores públicos, eliminar el control legislativo sobre el gasto y priorizar una agenda ideológica sobre los intereses de la ciudadanía.
La senadora Patty Murray describió a Vought como «un ideólogo extremo que busca otorgar a Trump poderes unilaterales para despedir a decenas de miles de empleados civiles».
Mientras tanto, los representantes Jamie Raskin y Melanie Stansbury acusaron a la administración Trump de querer desmantelar las estructuras que proveen servicios esenciales, como la salud de los veteranos y la Seguridad Social.
Una señal para el futuro
Con estas designaciones, Trump apunta a consolidar el control presidencial.
Además de avanzar una agenda conservadora que podría redefinir la relación entre el gobierno federal y la sociedad estadounidense.
La evolución de su segundo mandato dependerá de cómo estas figuras implementen sus visiones y enfrenten la resistencia política que, sin duda, marcará este nuevo capítulo.
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