Donald Trump pierde su apelación de la «orden mordaza» tras caso penal de Nueva York
- Trump pierde su apelación.
- Orden mordaza sigue vigente.
- Enfrenta 34 cargos penales.
El tribunal de apelaciones de Nueva York rechazó el intento de Donald Trump de anular una «orden mordaza».
Misma que limita sus comentarios públicos y le ha supuesto varias multas en su caso penal.
Trump, expresidente y candidato republicano, buscaba invalidar la orden que le impide hablar sobre jurados, testigos, personal de la corte y fiscales individuales.
Con la excepción del fiscal de distrito de Manhattan, Alvin Bragg, según lo redactó la agencia de ‘EFE’.
Corte ratifica orden mordaza a Trump
El tribunal de apelaciones señaló: «Hemos considerado los argumentos restantes del solicitante y los consideramos inútiles».
En mayo, Trump se convirtió en el primer expresidente de Estados Unidos en ser declarado culpable en un juicio penal, enfrentando 34 cargos por falsificación de registros comerciales.
También podría interesarte: ¿Maduro no puede con la presión? Hace inesperada petición en Venezuela.
Además, estos cargos están relacionados con el pago a una actriz porno para proteger su campaña presidencial de 2016.
La sentencia de Trump, inicialmente programada para el mes pasado, se pospuso hasta el 18 de septiembre.
Para que el juez pueda estudiar un fallo reciente del Tribunal Supremo de EEUU que podría afectar su condena.
Desde marzo, Trump tiene una «orden mordaza» que le prohíbe hacer comentarios públicos sobre los involucrados en el caso.
Durante el juicio, el juez Juan Manuel Merchan declaró en diez ocasiones en desacato a Trump por violar la orden de silencio, imponiéndole multas y amenazas de encarcelamiento.
En junio, Merchan levantó parcialmente la «orden mordaza» relacionada con los jurados y testigos.
Pero mantuvo las restricciones sobre declaraciones respecto al personal del tribunal, fiscales y sus familias.
La vicepresidenta Kamala Harris, ha utilizado el caso penal de Trump en su campaña, presentándose como una exfiscal que se enfrenta a un «delincuente convicto».
El rechazo del tribunal de apelaciones marca un nuevo revés legal para Trump, quien ha enfrentado múltiples desafíos judiciales desde su salida de la presidencia.
Asimismo, los 34 cargos por falsificación de registros comerciales se centran en la acusación de que Trump intentó ocultar pagos de dinero a la actriz porno Stormy Daniels.
Estos pagos se realizaron supuestamente para evitar un escándalo que pudiera dañar su candidatura presidencial.
La «orden mordaza» se implementó para evitar que Trump influya en el juicio con sus comentarios públicos.
Sin embargo, Trump ha criticado repetidamente la orden, argumentando que infringe su libertad de expresión.
A pesar de las restricciones, Trump ha seguido siendo vocal en las redes sociales y en apariciones públicas, desafiando las limitaciones impuestas por la corte.
El caso ha atraído una intensa atención mediática, destacando la naturaleza polarizadora del expresidente y sus problemas legales.
Los abogados de Trump han argumentado que la «orden mordaza» es innecesaria y que sus comentarios no han interferido en el proceso judicial.
El juez Merchan ha sido firme en mantener las restricciones, enfatizando la importancia de un juicio justo e imparcial.
Además, la decisión del tribunal de apelaciones refuerza la postura del juez y mantiene las restricciones sobre Trump.
La próxima audiencia programada para el 18 de septiembre será crucial para determinar el futuro de la sentencia de Trump.
El fallo reciente del Tribunal Supremo de EEUU, que podría influir en el caso, se relaciona con cuestiones de procedimiento legal y derecho penal.
Los seguidores de Trump han denunciado el caso como una persecución política, mientras que sus críticos ven la condena como una medida necesaria para la rendición de cuentas.
El caso de Trump continuará siendo un tema central en la arena política y judicial, con implicaciones significativas para su campaña presidencial y la percepción pública de su legado.