Texas: Reo hispano fallece en extrañas circunstancias en la cárcel

• Reo hispano: Alberto Peña, de 29 años, falleció cuando estaba en custodia de la Oficina del Alguacil del Condado de Starr en Rio Grande City, en el sureste de Texas, por un delito de conducta criminal.
• El propio padre de Peña fue quien pidió que arrestaran a su hijo pues el muchacho estaba muy violento y bajo los efectos del alcohol, marihuana y cocaína; rompía las puertas y paredes de la casa a puñetazos.
• Cuando estaba en la cárcel, Peña continúo su beligerancia e incluso se golpeaba solo la cabeza contra la puerta de la celda y tuvieron que amarrarlo a una silla hasta que se desvaneció y luego murió.

Alberto Peña falleció al estar en una cárcel

en el sureste de Texas y ahora las autoridades investigan si sufrió abuso o negligencia.

Peña, de 29 años, falleció cuando estaba en la cárcel detenido bajo custodia de la Oficina del Alguacil del Condado de Starr (SCSO, por sus siglas en inglés), en el sureste de Texas y ya casi en la frontera con México, el pasado jueves 13 de agosto del 2020 en la población de Rio Grande City.

Ahora la oficina de los Texas Rangers, una fuerza de detectives de élite del Departamento de Seguridad Pública de Texas (TxDPS, por sus siglas en inglés), investiga la muerte de Peña para saber si el hombre padeció algún tipo de negligencia o abuso mientras estaba en las celdas.

Hasta ahora la causa de su muerte no se ha determinado oficialmente por las autoridades.

La historia, que culminó con la trágica muerte de Peña en la cárcel, comenzó aquel 13 de agosto cuando su propio padre llamó al número de emergencia del SCSO para solicitar que fueran a arrestar al muchacho a su casa pues estaba muy violento y presuntamente había consumido un cóctel de cocaína, marihuana y alcohol.

El padre asentó en su reporte, consultado por MundoHispánico en Texas, que el muchacho estaba «errático y andaba golpeando las puertas» causando daños en su vivienda.

Los patrulleros del SCSO fueron por Peña y lo detuvieron justo cuando el hombre golpeaba con furia las paredes de la casa con los puños, abriendo hoyos sin sentido y lanzando imprecaciones.

El motivo de tal enojo del hombre era totalmente desconocido por su padre y el resto de la familia.

Según los registros carcelarios, Peña entró a la Cárcel del Condado de Starr a las 3:31 de la tarde bajo los cargos de conducta criminal causando daños por más de 100 pero por menos de 750 dólares.

Debido a su beligerante estado, los oficiales del SCSO que trabajan como custodios carcelarios decidieron poner a Peña en una celda en solitario para que no agrediera a otros reos y con la esperanza de que se calmara y se le pasara el efecto de las drogas y el alcohol antes de que lo llevaran a ver al juez calificador.

Uno de los carceleros anotó en sus observaciones que el reo Alberto Peña no quería cooperar con las autoridades carcelarias pese a que le pidieron varias veces que se calmara.

En un punto el detenido «comenzó a golpearse solo dándose de cabezazos contra la puerta de la celda», detalla el reporte pese a que los oficiales le pedían que se calmara.

La agresividad de Peña era tal que un oficial superior de los custodios ordenó poner al reo en un Sistema de Restricción y Amarre (WRS, por sus siglas en inglés) que es una especie de silla en donde se le colocan bandas atando el cuerpo e inmovilizándolo de piernas y brazos.

El sargento del SCSO que ordenó poner a Peña en el WRS también indicó a sus subordinados que colocaran la silla justo enfrente a la cámara de la celda de desintoxicación en la que pusieron al hombre.

Sin embargo, la cámara mostró que a las 7:50 de la noche Peña se sacudía c0n furia rodándose por el suelo y golpeándose la cabeza. Los oficiales lo levantaban y lo volvía a hacer.

En un momento, el reo hispano logró zafarse del WRS y fue a darse de cabezazos otra vez contra la puerta de la celda. Los agentes volvieron a amarrarlo con más fuerza a la silla.

Los oficiales incluso trajeron a un primo de Peña, quien también estaba en la cárcel por otro delito, para que hablara con el muchacho y le pidiera que se calmara.

A las 8:50 de la noche, el primo fue a hablar con Peña para conminarlo a que cambiara su actitud beligerante.

Sin embargo, el hombre no escuchó a su familiar y siguió sacudiéndose de forma violenta tratando de zafarse de las ataduras y golpeándose la cabeza contra la puerta. Al primo lo regresaron a su celda.

Un oficial volvió a pasar frente a la celda de Alberto Peña a las 9:12 de la noche y vio que el reo ya no se movía.

El carcelero pidió apoyo a otros compañeros para entrar a la celda y revisar al detenido. La cámara adentro de la celda reveló que el hombre se había desvanecido a las 9:01 de la noche y ya no volvió a moverse,

Los oficiales del SCSO ordenaron que el hombre fuera trasladado de emergencia a un hospital cercano. Sin embargo, los médicos ya no pudieron hacer nada por salvarle la vida a Alberto Peña, quien fue declarado oficialmente muerto a las 10:07 de la noche del jueves 13 de agosto.

El jueves 20 de agosto, los Texas Rangers solicitaron toda la información del caso y abrieron una investigación para determinar si los oficiales carcelarios del SCSO tienen alguna responsabilidad por abuso o negligencia en la muerte de Alberto Peña.

Un vocero del TxDPS declinó hacer comentarios a MundoHispánico en Texas sobre la muerte de Alberto Peña pues explicó que mientras el caso está bajo investigación no harán ninguna declaración sino hasta que se deslinden responsabilidades.

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