Laura Bozzo pide perdón y rompe en llanto tras comentarios sobre Samira Jalil y Julia Gama

- Laura Bozzo pide perdón
- Llora en televisión nacional
- Afectada por críticas públicas
La participación de Laura Bozzo en ‘La casa de los famosos All-Stars’ ha dado mucho de qué hablar, y no precisamente por su desempeño como concursante.
Además, la conductora peruana se encuentra en medio de una intensa controversia tras lanzar comentarios ofensivos contra sus compañeras Samira Jalil y Julia Gama.
Los dichos de Bozzo, que fueron señalados por muchos como xenófobos y agresivos, causaron una fuerte reacción en redes sociales y entre los seguidores del reality de Telemundo.
Ante la ola de críticas, la presentadora apareció visiblemente afectada este martes en el programa La mesa caliente para expresar su arrepentimiento.
Laura Bozzo se disculpa públicamente en TV

Con lágrimas en los ojos, Laura se sinceró en un espacio que se tornó profundamente emotivo.
“Me siento realmente muy avergonzada porque siento que esa no es la Laura que ellos han conocido toda su vida”, afirmó.
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Explicó que su comportamiento se dio en un contexto de vulnerabilidad emocional y física, que terminó por afectar su conducta dentro del programa.
“Yo he pasado por un proceso muy fuerte de depresión, La casa en esta ocasión yo con la pierna mal y todo eso me hizo mucho daño; hay que estar ahí para saber lo que uno pasa”, expresó, sin poder contener el llanto.
En medio de sus declaraciones, recordó su trayectoria como defensora de migrantes y personas en situación vulnerable, contrastando esa faceta con lo sucedido.
“Yo toda mi vida he sido una lucha por los migrantes, los he tenido en mi casa cuando se trataban de casos de trata y estas groserías que yo he cometido son inexcusables”, reconoció con pesar.
Bozzo también reveló que se comunicó directamente con Samira Jalil para ofrecerle disculpas por sus palabras.
“Yo llamé a Samira y le pedí perdón telefónicamente porque ella me agarró en un momento débil y me dijo: ‘Ya Laura, tú estás acabada’”, relató.
La conductora confesó que esa frase fue un detonante emocional para ella, generando una respuesta visceral.
“Y cuando a mí me pinchan sale el monstruo y yo puedo ser buenísima, pero también puedo ser un monstruo cuando me siento atacada”, admitió.
Laura Bozzo también se refirió al desgaste emocional que le ha producido el paso del tiempo y la presión por mantenerse vigente frente a una generación más joven.
“Es un momento de mi vida difícil porque sientes que has llegado a cierta edad y que no puedes competir con la gente joven muchas veces y de verdad ha sido muy doloroso para mí”, explicó con la voz quebrada.
El conflicto llega a su familia

Pero las repercusiones de sus actos no se limitaron al público o a los medios, sino que también afectaron a su vida familiar.
“Mis hijas aman a Julia y obviamente hay una que ya me bloqueó por el problema de Julia”, reveló con tristeza.
Contó que una de sus hijas le expresó su decepción al ver la versión de Laura que emergió dentro del reality.
“Mi hija me dice: ‘Yo no te conozco, esa no eres tú’”, compartió Bozzo durante la transmisión.
La conductora identificó esa actitud como producto de un cúmulo de tensiones vividas en el encierro.
“Ese personaje grotesco, agresivo, producto de todas esas malas energías que yo asumí dentro de La casa, como esta cicatriz de la mano quemada por Niurka; son muchas cosas que yo me tragué y a la hora de salir explosioné”, explicó.
En uno de los momentos más duros de la entrevista, Bozzo expresó el dolor que le causa sentirse alejada de su esencia y de su trayectoria como figura pública.
“Yo soy Laura en América, la defensora de la gente, la que ha luchado, la que ha dado su vida, la que ha estado secuestrada… porque mucha gente no tiene la menor idea de lo que yo he vivido”, dijo.
“Soy una vergüenza para el público”: Bozzo se muestra vulnerable
La presentadora reconoció que ha fallado a su audiencia, a su familia y a sí misma, dejando una declaración contundente.
“Soy una vergüenza para el público”, concluyó entre lágrimas.
Pocas veces se ha visto a Laura Bozzo tan vulnerable frente a las cámaras.
Y su emotiva aparición ha abierto un nuevo capítulo en su historia pública.

