La función de cada uno de los «Chapitos» en el Cártel de Sinaloa
- Tienen papeles establecidos
- Juntos «sacan adelante» el cártel de su padre
- Cada uno tiene funciones diferentes
Tal como «El Chapo» Guzmán les enseñó, ahora siguen el legado del narcotráfico mientras su padre cumple con una cadena perpetua en Estados Unidos. Para lograr con éxito sus actividades delictivas tienen un rol asignado. Hoy te contamos de la función de cada uno de los «Chapitos» en el Cártel de Sinaloa.
De acuerdo con Insight Crime, tanto Ovidio, como Iván y Jesús Alfredo fueron instruidos desde su adolescencia por su padre y el «Mayo» Zambada en el negocio del narcotráfico. Sin embargo, algunos de los «Chapitos» han llamado más la atención de las autoridades de México y Estados Unidos que otros.
La función de cada uno de los «Chapitos» en el Cártel de Sinaloa
A pesar de sus diversas actividades, el gobierno de Estados Unidos identificó su importancia en el narcotráfico, por lo que ofrece hasta 20 millones de dólares de recompensa por los cuatro. En 2021, el presidente de EEUU Joe Biden, firmó una orden ejecutiva como parte de una estrategia para desmantelar organizaciones del crimen organizado, incluidos los hermanos Guzmán Salazar y Guzmán López. Se ofrecen cinco millones de dólares por cada uno a cambio de información que conduzca a su arresto o a su paradero, según Infobae.
Estos cuatro son conocidos como miembros de alto rango del Cártel de Sinaloa , que tiene presencia en Estados Unidos, así como en Europa, Asia y África. Además, todos enfrentan una acusación federal en Estados Unidos por su participación en el narcotráfico.
Jesús Alfredo Guzmán «Alfredillo» líder de los «Chapitos»
Según Insight Crime, Jesús Alfredo, alias «Alfredillo», tiene un perfil más alto en las operaciones del Cártel de Sinaloa, e incluso gracias a ello aparece en la lista de los más buscados de la Administración para el Control de Drogas (DEA).
El Cártel de Sinaloa tiene presencia internacional, por lo que al parecer Jesús es responsable de algunas operaciones en otros países. En 2016, se informó que «Alfredillo» vivió durante varios meses en la ciudad de Medellín, Colombia, según una investigación de la revista Proceso luego de su secuestro en ese mismo año en Puerto Vallarta, Jalisco, el cual al parecer habría sido perpetrado por el Cártel Jalisco Nueva Generación y en su estadía en dicho país supuestamente tenía que ver con negocios de cocaína.
Iván Archivaldo Guzmán «El Chapito»
Iván Archivaldo Guzmán Salazar a menudo se identifica como el heredero del imperio de las drogas «El Chapo». Por eso su apodo es «Rey de la Cocaína», o simplemente «El Chapito». Según el Departamento de Estado de Estados Unidos, Archivaldo ayudó a mover drogas de América del Sur y Central a México, así como a transportar cada una de ellas a Estados Unidos, distribuirlas en ese país y recaudar ganancias.
Con su hermano Joaquín estableció laboratorios de fentanilo en Culiacán, además de que ambos ampliaron sus operaciones por vía marítima y aérea, así como a través de túneles en los pasos fronterizos. También se encarga de dar sobornos a funcionarios estatales según el portal Omnia.
Ovidio y Joaquín Guzmán López, los «Chapitos» que unieron fuerzas
Ovidio Guzmán López «El Ratón», es quizás la figura más destacada de los «Chapitos», luego de que su rostro se volviera viral en los medios en 2019, cuando fue detenido y luego liberado, durante un operativo. Es señalado por el gobierno de Estados Unidos por presuntamente ordenar el asesinato de un cantante (no se especificó cuál) por negarse a cantar en su boda según el portal Omnia.
Mientras tanto, Joaquín Guzmán es quizás el menos conocido de los hijos de «El Chapo». También responde al apodo de «Guero Moreno». Tras la muerte de su hermano Edgar Guzmán López, heredaron el poder y las ganancias de la empresa criminal, y juntos formaron su propia célula, conocida como Organización Criminal Transnacional Guzmán-López. , aunque no están separados del Cártel de Sinaloa. Se dice que los hermanos Guzmán López son responsables de unos 11 laboratorios de drogas en Sinaloa, que se estima producen entre 1,300 y 2,200 kilogramos de metanfetamina por mes. La droga fabricada se vende al por mayor a distribuidores en otros países, como Canadá y Estados Unidos, así como a otros miembros del Cártel de Sinaloa. Entre sus otras actividades se encuentra la exportación de efedrina desde Argentina. Según las autoridades estadounidenses, los dos hermanos invirtieron millones de dólares para comprar cocaína en Colombia y traficarla por todo el mundo.
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