José Luis Erebia es acusado del asesinato de Rubén Castillo

• José Luis Erebia fue detenido en Corpus Christi, Texas, acusado del asesinato de un padre de familia
• Erebia, de 26 años, es el segundo detenido en la muerte de Rubén Castillo
• Roland Cabrera ya estaba preso por la misma muerte

José Luis Erebia fue detenido

en Texas acusado de ser el segundo tirador que mató a Rubén Castillo, un padre de familia en Corpus Christi, Texas, un asesinato por el que ya estaba detenido Roland Cabrera.

Erebia, de 26 años, fue detenido por agentes federales de los U.S. Marshals de la Fuerza de Tarea del Golfo, especializados en detener a presuntos delincuentes considerados fugitivos y violentos.

La orden de arresto en contra de José Luis Erebia con la que actuaron los agentes federales fue emitida por la División de Homicidios del Departamento de Policía de Corpus Christi (CCPD, por sus siglas en inglés).

José Luis Erebia ya duerme en la cárcel del Condado de Nueces, acusado de ser uno de los dos presuntos asesinos del padre de familia Rubén Castillo, de 35 años al momento de morir, en un crimen que conmocionó a la comunidad hispana.

Junto a Erebia fue detenida Vallenie Marie Sánchez, de 29 años, acusada del delito de esconder a un fugitivo, ya que la chica mantenía al hombre en su casa desde hacía días, con la presunta intención de que la policía no lo detuviera.

Además de Erebia, los agentes de la División de Homicidios del CCPD ya habían detenido a Roland Cabrera el lunes 30 de noviembre del 2020, también acusado de la muerte de Castillo.

La trágica muerte de Rubén Castillo caló hondo en la comunidad hispana de Corpus Christi porque el hombre, padre de cuatro hijos, era un querido entrenador de fútbol americano de equipos para niños y jóvenes.

De acuerdo a la División de Homicidios, los hechos ocurrieron casi a la media noche del sábado 14 de noviembre en el 3100 South Port Avenue y Tarlton Street, al sur de Corpus Christi.

Según las autoridades, afuera de la tienda de conveniencia An’s Market hubo una confrontación entre varios hombres hispanos por motivos que aún no están claros en la investigación.

Cuando se escucharon los tiros, todos los hombres que estaban congregados afuera de An’s Market salieron corriendo y las autoridades descubrieron que entre alguno de ellos estaba el presunto responsable de los disparos.

Los videos en las cámaras de seguridad del negocio les permitieron a los agentes de la División de Homicidios del CCPD identificar a dos de los presuntos tiradores cuando estaban adentro de la tienda, uno de ellos con una caja de cervezas.

Después del tiroteo, afuera del negocio los empleados descubrieron que estaba un hombre herido tendido en el estacionamiento y llamaron al número de emergencias para que ayudaran a la víctima.

Sin embargo, los primeros patrulleros que llegaron a la escena del crimen ya no pudieron hacer nada por el hombre y se le declaró muerto en el lugar del incidente, por varios disparos de por lo menos dos armas de fuego.

Cuando las autoridades dieron a conocer al público del hombre muerto como Rubén Castillo, una ola de indignación recorrió Corpus Christi y en especial a la comunidad hispana de la ciudad costera frente al Golfo de México.

Rubén Castillo era muy conocido en la ciudad por su labor como coach (entrenador) de fútbol americano del Corpus Christi Sun Devil Football, en donde entrenaba a niños y adolescentes para forjarles el carácter por medio del deporte.

Los Corpus Christi Sun Devil Football, por medio de un comunicado firmado por el coach Julián lamentaron la muerte de su entrenador Rubén Castillo.

«Uno de nuestros amigos más queridos y miembro de la familia, Rubén Castillo, nos fue arrebatado el pasado fin de semana y todos estamos muy tristes por la noticia», dijo el comunicado de la organización deportiva.

Con base a las imágenes, los agentes de la División de Homicidios del CCPD pudieron identificar a Roland Cabrera primero y, luego de localizarlo, lo llevaron a la sede de la corporación para interrogarlo.

Sin embargo, el hombre en su testimonio sobre los hechos cayó en varias contradicciones y los agentes lo detuvieron. En las pruebas periciales y declaración de testigos se comprobó que era uno de los dos presuntos asesinos.

Lo único que los agentes no pudieron hacer fue que Cabrera señalara con nombre y apellido a su presunto cómplice en el asesinato del padre de familia.

Por eso, los agentes de la División de Homicidios continuaron durante casi otro mes investigando el entorno del hombre, sus amistades y vínculos. Esa investigación fue la que los llevó al arresto de José Luis Erebia.

En la madrugada del miércoles 23 de diciembre, los agentes de la División de Homicidios del CCPD le informaron a sus colegas federales de los U.S. Marshals en dónde se escondía José Luis Erebia.

Ante la presunción de que Erebia estuviera armado, los agentes montaron una operación afuera de una casa en el 700 Glenoak Drive, al sureste del área metropolitana de Corpus Christi.

En el lugar los agentes hablaron con la dueña de la casa, Vallenie Marie Sánchez, y le informaron que sabían que adentro escondía a Erebia y que era mejor que se entregara sin oponer resistencia para no desatar una confrontación.

Ahora, José Luis Erebia y Roland Cabrera podrían enfrentar cada uno, de acuerdo al Código Penal del Estado de Texas, una pena de 20 a 99 años de cárcel si se les declara culpables en un juicio por el asesinato de Rubén Castillo.

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