Jorge Guevara, de 49 años, fue condenado a 15 años de prisión por apuñalar a su novia durante una disputa doméstica en Long Island.
El ataque ocurrió el 28 de marzo de 2023. Guevara apuñaló repetidamente a su novia en el cuello y hombro, usando un par de tijeras.
Tres menores presenciaron el violento ataque, aunque no se especificó su relación con la víctima o el agresor, según las autoridades locales.
El fiscal de distrito de Suffolk, Raymond A. Tierney, confirmó la sentencia, que también incluye cinco años de supervisión posterior a la liberación del agresor.
La comunidad de Long Island quedó conmocionada por la brutalidad del ataque y el hecho de que los niños presenciaran la escena.
La víctima, que había regresado del trabajo, fue atacada por Guevara después de que ambos comenzaran a discutir. Él inicialmente la amenazó con un cuchillo.
Durante el forcejeo por el cuchillo, Guevara tomó unas tijeras de un escritorio y apuñaló a su novia, causando heridas graves en su cuello.
La víctima fue trasladada a un hospital cercano, donde fue sometida a una cirugía de emergencia debido a una profunda laceración en su cuello.
Tras el ataque, Guevara impidió que la víctima o los niños llamaran al 911. Un vecino finalmente intervino, pero también fue retenido.
El vecino logró escapar saltando por una ventana, después de que Guevara bloqueó la puerta, y llamó a la policía, quienes acudieron rápidamente.
Un jurado del condado de Suffolk declaró culpable a Guevara de asalto en primer grado y otros cargos relacionados con la agresión doméstica.
El juez interino de la Corte Suprema, Steven Pilwski, dictó la sentencia de 15 años de prisión para Guevara, condenando su violento comportamiento.
Tierney calificó el incidente como un “horrible acto de violencia doméstica” que tendrá efectos duraderos para todos los involucrados, especialmente los niños.
Tierney destacó el sufrimiento de la víctima y la traición de confianza por parte de alguien que debería haber sido su protector.
El fiscal espera que la sentencia ayude a la familia a comenzar su proceso de sanación y a encontrar justicia tras el traumático suceso.
“Este caso representa un acto horrible de violencia doméstica que dejará cicatrices duraderas en todos los involucrados“, dijo Tierney el jueves en un comunicado.
“No podemos comenzar a comprender el terror que experimentaron esos niños, o la traición y el dolor que la víctima sufrió a manos de alguien que debería haber sido su protector“, agregó. “Esperamos que este resultado ayude a la familia a medida que comienzan su viaje de curación y recuperación”.
La oficina del fiscal reiteró su compromiso de luchar contra la violencia doméstica y brindar asistencia a las familias afectadas por este tipo de delitos.
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