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Texas: Hispano intenta quemar a su exnovia por orden de ‘unas voces’

Hispano casi mata exnovia en Texas Armando Garza-Olivarez fue detenido porque "unas voces" le dijeron que la matara y a su novio quemándolos.
2020-05-19T19:39:23+00:00
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  • Por orden de unas voces: Armando Garza-Olivarez, de 24 años, le aseguró al Departamento de Policía de Donna, en Texas, que intentó incendiar la casa de su exnovia porque «unas voces» se lo ordenaron.
  • Antes de que empezara el incendio Garza-Olivarez se paró en la calle afuera de la casa de mujer, quien ya tiene un nuevo novio, y le gritó «¡callejera, ramera!» según declaró la víctima pese al estado de trauma.
  • Garza-Olivarez está acusado del cargo grave de intento de homicidio capital y que el estado de Texas se castiga con una pena de hasta 20 años en la cárcel.

Hispano casi mata exnovia en Texas.

Armando Garza-Olivarez fue detenido porque «unas voces» le dijeron que matara a su exnovia y su nuevo novio quemándolos.

Garza-Olivarez, de 24 años, fue detenido por el Departamento de Policía de Donna (DPD, por sus siglas en inglés), una pequeña ciudad en el sureste de Texas, luego de que intentó prender fuego la casa en la que estaba dormida su expareja con su nuevo compañero.

El hombre ahora enfrenta cargos de intento de homicidio capital un delito considerado grave en Texas.

De acuerdo con la investigación del caso, consultada por MundoHispánico, un oficial del DPD recibió un reporte para que fuera el martes 12 de mayo del 2020  en la mañana a la casa marcada con el 100 South Main Street en donde vecinos reportaban un incidente.

El oficial asentó en su reporte que cuando llegó observó que flamas de fuego y densas columnas de humo salían de la casa consumiéndolo todo.

De inmediato el agente pidió la presencia de los bomberos y además solicitó asistencia médica para dos personas, un hombre y una mujer, que estaban en la calle afuera de la casa que se incendiaba.

El hombre, de 23 años, se acercó al oficial y le reveló que él y su novia, una mujer de 41 años, estaban dormidos en la parte de arriba de la casa cuando vieron que toda la casa comenzaba a rodearse de fuego.

Los nombres de las dos potenciales víctimas no fueron revelados, por decisión del juez, para proteger su identidad.

De acuerdo al oficial del DPD el testigo le aseguró que cuando escapaban de incendio alcanzaron a ver al exnovio de la mujer Armando Garza-Olivarez quien escapaba del lugar al poco de que comenzaba a avivarse el fuego.

El oficial tomó la declaración de las víctimas y, ante la presunción del responsable, decidió enviar sus datos a otros patrulleros del DPD que anduvieran por la zona.

La descripción señalaba a un joven hispana, con varios tatuajes en los brazos, cuellos y rostro, quien bajaba en una bicicleta y llevaba una camiseta negra con blanco y que en el pecho tenía la leyenda Boss (Jefe) y quien era conocido como ‘Mando’.

Momentos después otros agente del DPD, quien ya estaba advertido de la descripción del presunto sospechoso, lo atisbó sentado en una parada de camión.

El agente detuvo a Garza-Olivarez, para investigarlo primero, y lo llevó en su patrulla de regresó a donde había ocurrido el incendio.

Cuando el segundo patrullero llegó con Garza-Olivarez el nuevo novio de la mujer, al verlo, se alteró y comenzó a gritarle «¡mira lo que hiciste, mira, trataste de quemarme a mí y a mi novia!». Los oficiales del DPD tuvieron que separar al hombre de la patrulla.

Armando Garza-Olivarez, de 24 años, le aseguró a la policía que «unas voces» le ordenaron matar a su exnovia y su nuevo novio quemándolos. (Foto: Oficina del Alguacil del Condado de Hidalgo)

La mujer decidió entonces dar su declaración, cuando se reponía del estado de conmoción, y aseguró que ella había tenido una relación con Garza-Olivarez pero que habían terminado meses antes y luego había conocido a otro muchacho del cual se enamoró.

Desde que rompieron, según la mujer, Garza-Olivarez la había tratado de contactar varias veces pero ella rehusó todas sus aproximaciones.

Sin embargo, a las 4:00 de la madrugada de aquel martes 12 de mayo del 2020, escuchó que alguien la llamaba a gritos desde la calle. Cuando se asomó vio que era Garza-Olivarez quien le clamaba que saliera a fumar con él.

La mujer le pidió a su ex novio que se fuera, cerró la ventana y se acurrucó en la cama con su nueva pareja.

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Entonces Garza-Olivarez comenzó a gritarle que era «¡una ramera, una callejera!» hasta que luego se calló y ella pensó que el muchacho había ido. La mujer le pidió a su novio que no saliera para evitar una confrontación.

Poco después de las 6:00 de la madrugada la mujer y su novio ya estaban dormidos nuevamente cuando escucharon crujidos de madera en la casa y un fuerte olor a humo.

La pareja abrió los ojos y vieron que gruesas columnas de fuego engullían la parte de abajo de su casa por lo que, apenas con lo que iban vestidos, brincaron desde el segundo piso por las ventanas para escapar del incendio.

Un vecino que salía temprano a trabajar advirtió el incendio y fue el primero en llamar a las autoridades.

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Ese vecino fue crucial en la investigación porque describió cómo un muchacho, que coincidía con las características de Garza-Olivarez, escapaba de la zona del incendio en una bicicleta.

La declaración del vecino sostiene que el muchacho de la bicicleta iba gritando por la calle «¡desgracié a mi novia, desgracié al tipo!».

Conforme se alejaba el muchacho lanzó a la banqueta unos pedazos de una caja de cartón que ardían. El nombre del vecino no será revelado para evitar las represalias en su contra.

Los oficiales del DPD llevaron a Armando Garza-Olivarez al cuartel para interrogarlo, con base a la declaración del testigo y las víctimas, y el hombre admitió que ayudado de un encendedor había arrojado carbón en llamas al interior de la casa y espero hasta ver las flamas.

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Cuando los oficiales del DPD lo cuestionaron por qué lo había hecho el muchacho les aseguró que «unas voces me dijeron que los matara» mientras la pareja dormía.

Armando Garza-Olivarez fue llevado a la Cárcel del Condado de Hidalgo en donde enfrenta cargos de intento de homicidio capital por incendio premeditado.

De acuerdo al Código Penal del Estado de Texas el cargo de intento de homicidio capital enfrenta una pena de 20 años de cárcel a quien se encuentre culpable de ese delito luego de que enfrente su juicio.

El hombre no recibió el derecho a salir libre bajo fianza y hasta el momento de escribir esta historia continuaba en la cárcel a la espera de la que será su primera audiencia.

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