Hermanos terminan en prisión por transportar 10.000 pastillas de fentanilo

- Justin y David: Hermanos terminan en prisión.
- ‘Mordieron el anzuelo’ de la ley.
- Ahora son acusados de tráfico.
Creyeron haber burlado la ley luego de conducir desde California hasta Miami-Dade, en Florida.
Con 10.000 pastillas de fentanilo ocultas en una llanta de repuesto, pero al llegar a su destino los arrestaron.
La Oficina contra el Crimen Organizado de la Policía de Miami-Dade informó que el arresto de los hermanos Justin Hernández, de 19 años, y David Hernández, de 22; se logró.
Los hermanos cayeron en la trampa de los agentes, quienes de manera encubierta, concretaron, el pasado 29 de mayo, la compra del fentanilo.
Escondían en su neumático lo inesperado

«Estos individuos vinieron desde el Oeste del país hasta un punto específico del condado”, explicó el detective Ángel Rodríguez, portavoz de la policía de Miami-Dade.
El encargo de cerrar el negocio fue David Hernández, este convenció a su hermano de que lo ayudara a conducir y él le pagaría 5.000 dólares.
Pero el trato era simple, los hermanos conseguirían las 10.000 pastillas, viajarían hasta Florida y allí recibirían 10 mil dólares por la mercancía.
Ellos cumplieron y llegaron al lugar acordado, desconociendo que mordían el anzuelo de los detectives.
Justin y David tendrán que pagar las consecuencias

Sin embargo, una vez que en el lugar de la entrega, los Hernández sacaron un neumático de su Chevrolet Silverado y buscaron dentro cuatro bolsas.
Mismas que estaban selladas al vacío y que tenían pastillas de fentanilo M30, detalló el informe de arresto.
«Esta operación es prueba del trabajo ejemplar que está haciendo el MDPD para detener la epidemia de fentanilo que está afectando a nuestra comunidad».
Dijo la alcaldesa de Miami-Dade, Daniella Levine Cava, en un comunicado.
El negocio de su vida los dejó tras las rejas

De acuerdo a las autoridades, en el neumático escondieron cuatro bolsas de fentanilo M30.
Con un peso total de 1.050 gramos, con un costo en el mercado en más de 400.000 dólares.
Lo que consideraban el mejor negocio de sus vidas dejó a los Hernández tras las rejas.
Ahora, Justin y David son acusados de tráfico de fentanilo y con fianzas de 500.000 dólares.


