Exalcalde de EEUU culpable por llenarse los ‘bolsillos’ con ayudas del Covid-19

• Exalcalde de EEUU se declara culpable por llenarse los ‘bolsillos’ con ayudas del Covid-19
• Sus acciones terminaron privando a las comunidades de su entidad de los fondos que se habían destinado para ayudarles a sortear las dificultades de la pandemia
• Hasta el Buró Federal de Investigaciones (FBI) terminó involucrado en el enorme caso de fraude por el que terminó cayendo el alto funcionario

CULPABLE DE FRAUDE. Exalcalde de EEUU se declara culpable por llenarse los ‘bolsillos’ con ayudas del Covid-19, lo que terminó privando a las comunidades de su entidad de los fondos que se habían destinado para ayudarles a sortear las dificultades de la pandemia.

Hasta el Buró Federal de Investigaciones (FBI) terminó involucrado en un enorme caso de fraude por el que terminó cayendo un alto funcionario en Estados Unidos. Se trata de Jason Lary, exalcalde de Stonecrest, ciudad del Área Metropolitana de Atlanta, en Georgia, y de Lania Boone, quien fuera la contadora que administró los fondos de ayuda por Covid-19 asignados a la entidad.

Exalcalde de EEUU culpable por llenarse los ‘bolsillos’ con ayudas del Covid-19

A Lary y a Boone no les quedó más que declarase culpables por cargos en relación al robo de fondos de las ayuda económica de la localidad. «La declaración de culpabilidad de Lary fue la primera en corregir los errores cometidos contra la gente de Stonecrest, a quienes se les privó injustamente de cientos de miles de dólares destinados a brindar alivio por el COVID-19», comentó el fiscal federal Kurt R. Erskine.

«La declaración de culpabilidad de Boone demuestra aún más nuestro compromiso de enjuiciar a aquellos que buscan explotar los programas de ayuda de COVID para su propio beneficio», agregó el fiscal sobre el robo del dinero en un comunicado del Departamento de Justicia de Estados Unidos.

El FBI entra en acción

Philip Wislar, agente especial interino a cargo del FBI Atlanta, comentó que «los fondos de la Ley CARES estaban destinados a ayudar a las personas y las empresas perjudicadas por la pandemia, no para llenar los bolsillos de los funcionarios públicos encargados de dirigir una comunidad».

«El FBI hará todo lo que esté a nuestro alcance para asegurarse de que los fondos robados se devuelvan al público, y las personas involucradas en este tipo de comportamiento delictivo sean procesadas con todo el rigor de la ley», agregó el funcionario a cargo de la investigación.

Se robaron las ayudas de Trump

La Ley de ayuda, alivio y seguridad económica del coronavirus (mejor conocida como Ley «CARES») fue aprobada en marzo de 2020, cuando el presidente republicano Donald Trump aun ocupaba la Casa Blanca, con la idea de ofrecer una ayuda oportuna a las comunidades que se estaban enfrentando a algo nunca visto: la pandemia de Covid-19.

El condado de DeKalb, en Georgia, recibió $125 millones en fondos de ayuda de la Ley CARES. Posteriormente, en julio de 2020, la Junta de Comisionados del Condado de DeKalb aprobó distribuir estos fondos entre los municipios y fue así como la ciudad de Stonecrest, que dirigía el alcalde Jason Lary, recibió $6,2 millones de dólares.

¿Qué hizo con el dinero de la gente?

Tal como especificaba la Ley CARES, el dinero debía «utilizarse para cubrir costos que [fueran] gastos necesarios incurridos debido a la emergencia de salud pública… y fueron incurridos durante el período que [comenzó] el 1 de marzo de 2020 y [finalizó] el 30 de diciembre de 2020». ¿A qué gastos se referían? A gastos médicos, gastos de salud pública y ayudas a pequeñas empresas que se vieron amenazadas por cierres obligatorios.

En el caso de Stonecrest no ocurrió así. Según el informe de la fiscalía, Lary  firmó un documento en el que reconocía los requisitos de la Ley CARES, pero «en la práctica, el programa Stonecrest Cares dirigió fondos de ayuda a iglesias y organizaciones sin fines de lucro en Stonecrest y sus alrededores». Allí comenzó a verse todo turbio.

¿Qué descubrió la policía?

El movimiento de los fondos se volvió un tanto descarado cuando la ciudad no entregó los $6 millones asignados al Programa Stonecrest Cares y al Programa de Pequeñas Empresas. ¿Qué hicieron con el dinero? Pues, contrataron los servicios de contabilidad de la Municipal Resource Partners Corporation, Inc. («MRPC») para que les ayudarán a desembolsar los fondos a su gusto, no sin que antes Lary agregara a Lania Boone en la ecuación como la contadora de la empresa.

Ya organizado el plan, Stonecrest llegó abrir en su sitio web un espacio para que las empresas solicitaran los fondos del Programa para pequeñas empresas, pero directamente les preguntaban: «¿está dispuesto a asignar el 25% de su subvención a la comercialización de su negocio?». La Fiscalía estima que entre noviembre de 2020 y febrero de 2021, «Boone firmó docenas de cheques en nombre de MRPC, destinando millones de dólares de fondos de ayuda a personas, empresas, iglesias y organizaciones sin fines de lucro», aunque no siguiera las reglas de la Ley CARES.

¿La mente maestra del plan?

En un caso de malversación de fondos y de abuso de poder, Lary orquestó un plan que le permitió llevar el dinero a dónde le convenía. El entonces alcalde comenzaba diciéndoles a las iglesias y empresas que recibieran el cheque, pero que después tenían que contribuir con parte del dinero según lo que él pidiera.

Las investigaciones determinaron que Lary y Boone defraudaron «cientos de miles de dólares de fondos de ayuda» y que el alcalde «usó el dinero para sus propios fines», como cuando pagó la publicidad política de uno de sus asociados, indica el informe de las autoridades.

Agarró dinero para pagarse una casa frente al lago

Aunque suene increíble viniendo de un alcalde, Lary agarró dinero para pagarse una casa frente al lago. «En enero de 2021, Boone usó su acceso a una de las cuentas bancarias de MRPC para transferir aproximadamente $108,000 de fondos de ayuda a una compañía de servicios hipotecarios. Lary y Boone sabían que el propósito de la transferencia era pagar la hipoteca de una casa frente al lago propiedad de Lary«, dice el texto del Departamento de Justicia. También determinaron que parte del dinero se usó para pagar «la matrícula universitaria y el alquiler del hijo de Boone».

Ambos tendrán que enfrentar a la justicia. Jason Lary, de 59 años, de Stonecrest, Georgia, será sentenciado el próximo 2 de mayo de 2022 a las 10 de la mañana; mientras que Lania Boone, de 60 años, de Decatur, Georgia, será sentenciada el 12 de mayo de 2022 a las 2:00 de la tarde. Exalcalde de EEUU culpable por llenarse los ‘bolsillos’ con ayudas del Covid-19.