Crónica: Hispano llama a la policía y él acaba arrestado

• Quiso denunciar que le habían robado
• Pero furioso, hizo una salvajada
• La policía lo metió preso por «cruel»

Francisco Javier Figueroa Ramírez acaba de aprender que la próxima vez que esté furioso no va a poder desquitarse con quien se le ponga enfrente.

Y es que este hispano de 38 años y residente de la ciudad de Norcross, en Georgia, acaba de darse cuenta de que acá, uno tiene que controlar sus impulsos.

Las autoridades locales lo apresaron luego de que él mismo les llamara para denunciar que su cuñado le había robado 400 dólares.

El latino esperaba que la policía fuera tras el hombre, pero en cambio, quien acabó en la cárcel fue él mismo y todo por no hacer las cosas bien.

“Vayan por el hermano de mi mujer”

Este inusual incidente ocurrió cuando Francisco llamó al 911 para reportar que acababan de robarle todo su capital.

Simultáneamente, otras tres personas llamaron a emergencia del mismo sitio para denunciar que había un tipo pateando un pobre perro.

Dos oficiales llegaron al motel, uno para atender el caso de robo y el otro para verificar lo del animal que estaba siendo maltratado.

Al llegar, los uniformados se encontraron afuera con Francisco y con otras dos personas. Resulta ser que los testigos acusaron al mismo hispano de haberle pegado a su mascota.

Mucha palabrería de parte de Francisco

Primero tomaron la declaración del latino sobre el robo de su efectivo que tenía en su billetera esa noche, del cual acusaba directamente al hermano de su mujer.

“¿Tu o alguien más lo vio tomando ese dinero?, ¿hay algún video donde se vea que él te lo robó?”, le preguntó uno de los agentes.

“No, nada de eso, pero estoy seguro de que fue él, porque es el único que nos visitó y como acaba de salir de la cárcel”, le respondió el hispano aún molesto.

Le dijeron que le harían un reporte por lo que estaba denunciando, pero que como su cuñado ya no estaba en el área, no podían salir a buscarlo sin tener mayores evidencias en su contra.

Ahora le llegó el turno a del can

A continuación, los representantes de la ley y el orden empezaron a indagar sobre la queja del abuso en contra del perro.

Resulta ser que dos vecinos de Francisco lo estaban señalando como el tipo que levantó punta pies al pobre animal.

El hispano aceptó que había golpeado sin querer a su mascota, cuando esta se le cruzó en su camino justo cuando recién se había dado cuenta del faltante del dinero.

La policía no le creyó y lo detuvo por crueldad animal, y salió libre tras pagar $1,300 de fianza. Su perro le fue confiscado.

“Eso querían estos, que me quitaran a mi mascota porque es cara”, declaró al respecto. Gracias por haber leído mi crónica de hoy en MundoNow. Hasta la próxima.