EEUU acusa a Walgreens de surtir millones de recetas ilegales, incluidas de opioides

- EEUU acusa a Walgreens.
- La cadena de farmacias en problemas legales.
- ¿Razón por la que ha cerrado ubicaciones?
El Departamento de Justicia de Estados Unidos presentó una demanda contra Walgreens.
Acusando a la cadena de farmacias de dispensar millones de recetas de sustancias controladas sin un propósito legítimo en la última década, incluyendo opioides en cantidades alarmantes.
La demanda, presentada en un tribunal federal del distrito norte de Illinois, señala que empleados de Walgreens procesaron recetas con claras señales de alarma que indicaban su probable ilegalidad.
Según los fiscales, la empresa presionaba a los farmacéuticos para dispensar medicamentos sin verificar adecuadamente su validez.
EEUU demanda a cadena de farmacias

Lo que constituye una violación de la Ley de Sustancias Controladas y la Ley de Reclamaciones Falsas.
En el documento judicial se acusa a Walgreens de ignorar alertas de sus propios empleados y datos internos que evidenciaban la dispensación de recetas ilegales.
TE PUEDE INTERESAR: ICE prepara redadas masivas en Nueva York y Chicago.
Además, la empresa habría obstaculizado a sus farmacéuticos, impidiendo que compartieran información crucial sobre prescriptores sospechosos.
El fiscal general adjunto principal, Brian M. Boynton, jefe de la División Civil del Departamento de Justicia, expresó que esta demanda busca responsabilizar a la cadena por años de incumplimiento en la regulación de opioides y otros medicamentos.
«Estas prácticas permitieron que millones de pastillas fluyeran ilegalmente fuera de las tiendas», declaró Boynton.
Walgreens, con más de 8,000 sucursales en todo el país, defendió a sus farmacéuticos mediante un comunicado.
La empresa afirmó que sus empleados cumplen la ley al dispensar recetas autorizadas por prescriptores con licencia y aprobadas por la FDA.
Además, la compañía calificó como arbitrarias las reglas que el gobierno busca hacer cumplir a través de esta demanda.
Argumentando que no están respaldadas por leyes ni regulaciones oficiales.
Walgreens solicitó al tribunal que defina con claridad las responsabilidades de las farmacias y los farmacéuticos.
Mientras, reafirmó su compromiso de liderar iniciativas contra el mal uso de opioides.
«No permitiremos que el gobierno ponga a nuestros farmacéuticos en situaciones imposibles, basadas en ‘reglas’ inexistentes», declaró la empresa.
La demanda contra Walgreens se suma a una presentada en diciembre pasado contra CVS, otra de las principales cadenas de farmacias en Estados Unidos.
CVS ha rechazado las acusaciones y calificado la narrativa del gobierno como falsa.
Estas acciones buscan responsabilizar a las empresas implicadas en la crisis de opioides, que provoca más de 80,000 muertes anuales.
Durante la última década, el fentanilo ilícito se ha convertido en el principal culpable de estas muertes.
Sin embargo, en años anteriores, las pastillas recetadas fueron las mayores responsables de la epidemia de adicción y sobredosis.
La crisis de opioides ha impulsado acuerdos multimillonarios entre fabricantes de medicamentos, mayoristas y farmacias.
En ocho años, los acuerdos han destinado cerca de 50,000 millones de dólares para combatir la adicción.
Walgreens ha enfatizado su papel en proporcionar educación y recursos, además de implementar políticas para mitigar el abuso de opioides.
No obstante, el Departamento de Justicia sostiene que las acciones de la empresa han facilitado el acceso ilícito a medicamentos controlados, exacerbando la crisis de salud pública.
Esta demanda podría marcar un hito en cómo las autoridades regulan y responsabilizan a las grandes cadenas de farmacias por su papel en la epidemia de opioides.
Mientras Walgreens defiende a sus empleados, mientras el gobierno busca prevenir prácticas similares.
El caso destaca la responsabilidad corporativa y su impacto en la salud pública durante la crisis de adicción.


