4 tips para inculcar hábitos saludables a tus hijos

- Las estadísticas no son alentadoras: más del 80% de los niños consume un exceso de azúcar
- ¿Cómo conseguir desarrollar hábitos alimenticios en la infancia?
- 4 consejos que puedes aplicar en casa para mejorar tu relación con la comida
¿Cómo fomentar hábitos de alimentación saludables en tus hijos? Esta es una respuesta clave que podría impactar de manera positiva en el desarrollo de los niños, y es que, según estadísticas de la OMS, en el mundo al menos 40 millones de menores sufren de obesidad, y 340 millones presentan algún tipo de deficiencia vitamínica que afecta negativamente a su salud.
En Estados Unidos, se estima que más del 80% de los niños consumen azúcares en exceso; una manera de reducir este riesgo es adoptando hábitos de alimentación balanceados ¡Y todo empieza en casa! Descubre cómo puedes conseguir que estos hábitos sean para toda la vida:
4. Cómo fomentar hábitos de alimentación saludables: Sé creativo en la cocina

¡No tengas miedo de ponerte creativo en la cocina! Hay muchas maneras diferentes de fomentar hábitos de alimentación saludables en tus hijos, y una de ellas es incorporando poco a poco una mayor cantidad de frutas y vegetales en tus recetas diarias; exponer a los niños a nuevos sabores y texturas podría ayudar a que disfruten de alimentos de mejor calidad durante la mayor parte del día.
Ser creativo en la cocina también será una excelente opción para reducir el consumo de comida rápida, que generalmente contiene grandes cantidades de grasas saturadas, carbohidratos y azúcares refinadas; en cambio, al preparar los alimentos en casa, existe un mayor control de los ingredientes utilizados, lo que ayuda a reducir la ingesta calórica diaria y evitar los excesos al momento de comer.
3. Lee las etiquetas de los productos

La educación es una de las mejores maneras de fomentar hábitos de alimentación saludables, tanto en adultos como en niños; mientras más información actualizada posea una persona, más sencillo será identificar cuáles son las mejores opciones alimentarias para mantener una salud óptima y reducir el riesgo de enfermedades como la hipertensión y la diabetes.
Leer las etiquetas ayudará a reconocer si un alimento es adecuado para una persona; esto incluye la cantidad de calorías por porción, los nutrientes, grasas, fibra, proteínas, carbohidratos y azúcares. No se trata de crear un recelo por los alimentos, sino de buscar un balance para que el consumo de alimentos procesados sea ocasional y estos no formen necesariamente parte de la dieta diaria.
2. Cómo fomentar hábitos de alimentación saludables: Crea una cultura de balance

Crear una cultura de balance será fundamental para favorecer la adopción de hábitos alimenticios más saludables; esto incluye reducir la ingesta de bebidas azucaradas o de alimentos procesados como los congelados, la comida rápida y los postres elaborados con azúcares refinados. Además, la sugerencia de los expertos para conseguir el balance también incluye la adopción de nuevos hábitos de actividad física.
Por lo general, el sedentarismo y el consumo excesivo de ciertos alimentos influye en el riesgo de padecer cierto tipo de enfermedades; practicar actividad física de leve a moderada es una excelente opción para reforzar la importancia del ejercicio como parte indispensable en el desarrollo humano.
1. Predica con el ejemplo

Todo cambio, comienza desde adentro; si lo que buscas es crear hábitos alimenticios saludables en los niños, lo ideal es que estos miren a los adultos a su alrededor llevando hábitos balanceados en cuanto a alimentación y actividad física; las connotaciones negativas con respecto al peso poco a poco deben quedar en el olvido, y ser reemplazadas con palabras de aliento para asociar al bienestar con un sentimientos positivos.
Hacerlo, ayudará a que los niños tengan una mayor motivación por crecer más fuertes, pero esto únicamente podrá ser posible si tienen un referente en casa o en los espacios donde pasen la mayor parte de su tiempo, como la escuela, que ponga en práctica hábitos como la alimentación saludable y balanceada, así como la actividad física regular.

